Nuestro patrimonio municipalista para la próxima década

Our municipalist patrimony for the next decade

“La transformación que hay que llevar a cabo en nuestro modelo de desarrollo sólo será posible si responde a los sueños y expectativas de la ciudadanía y de las comunidades, y si se asume la responsabilidad colectiva de adaptarnos y asumir compromisos en pos de sociedades más igualitarias, justas y sostenibles.” 

Nuestro patrimonio municipalista para la próxima década

“La transformación que hay que llevar a cabo en nuestro modelo de desarrollo sólo será posible si responde a los sueños y expectativas de la ciudadanía y de las comunidades, y si se asume la responsabilidad colectiva de adaptarnos y asumir compromisos en pos de sociedades más igualitarias, justas y sostenibles.” (Preámbulo a la Declaración Política de Durban)

La Declaración Política de Durban, adoptada por los y las electas locales en la Cumbre Mundial de Líderes Locales y Regionales en Durban, se basa en el trabajo de nuestro colectivo, así como en una visión sólida del futuro del movimiento municipal internacional para el siglo XXI, y tiene como objetivo innovar y consolidar nuestra estrategia.

Estructurada en torno a cuatro capítulos, abarca los principios de nuestro movimiento y la necesidad de apropiarse a nivel local de las agendas globales. Ahonda, además, en aquellos temas en los que estamos trabajando que serán críticos para el futuro de la humanidad, y en los compromisos de nuestro movimiento para cumplir los ambiciosos objetivos globales.

La dimensión local del desarrollo.

La Declaración de Durban prevé un movimiento municipal que haga frente a las tendencias mundiales volviendo a nuestras raíces y centrándose en la democracia local. Nuestro movimiento estará impulsado por la igualdad, que y promoverá la transición de un sistema internacional a uno interurbano que adopte una postura colectiva para poner fin a la pobreza y abordar las desigualdades.

La Declaración Política de Durban aborda a la renovación de la democracia local, la igualdad basada en la prestación de servicios públicos y busca garantizar que la cuarta revolución industrial sirva a nuestras comunidades y no sólo sea útil para aquellos que lo tienen todo. La construcción de la paz, la resiliencia y el compromiso con la localización son parte del patrimonio municipalista que necesita ser fomentado y protegido a medida que entramos en la próxima década.

Apropiación local para el futuro de la humanidad.

Nuestro movimiento ha estado abogando por la localización para lograr las agendas de desarrollo global. En el mundo interconectado en el que vivimos, es esencial subrayar que los ambiciosos objetivos que nos fijamos en 2015 y 2016 no se alcanzarán en el vacío. Sólo si abordamos todos los programas como uno solo, y sólo si lo hacemos desde la base entre todas las partes interesadas, lograremos los objetivos mundiales.

La Declaración de Durban establece los principios de una plataforma local-global que permitirá escuchar las voces locales, pero también llevar a cabo los cambios necesarios en la forma en que se co-creen las ciudades y los territorios, empoderando a las organizaciones que están arraigadas en sus comunidades. El movimiento municipal escuchará a la sociedad civil, a la academia y a todas las partes interesadas para lograr sociedades inclusivas y justas que permitan a nuestras comunidades cumplir sus metas y expectativas.

Los sueños de 2030

La Declaración Política de Durban abarca algunos de los temas clave en los que nuestro movimiento ya ha estado trabajando. El Derecho a la Vivienda es esencial para proporcionar a nuestras comunidades las condiciones para una vida adecuada, y pedimos más poderes para que los gobiernos locales y regionales puedan asegurar una vida decente para sus comunidades. Un enfoque de la migración basado en los derechos humanos que vaya más allá del control fronterizo y se dirija a los servicios básicos, y la renovación de la democracia y la ciudadanía que vea a los niveles de gobierno local y territorial como esenciales es clave para recuperar la confianza y reformar los sistemas de gobernanza son solo algunos de los temas clave para la próxima era.

La consolidación de la paz es clave para los gobiernos locales y regionales de todo el mundo. Una agenda basada en las personas que comparta conocimientos a través del diálogo intergeneracional es clave para promover un cambio transformador y permitir que los gobiernos locales y regionales contribuyan a una cultura de paz. Nuestro movimiento se compromete además a desarrollar los mecanismos para defender a aquellos que sirven a sus comunidades estando en posiciones de liderazgo público.

El futuro de nuestro movimiento tratará como prioridad la transición ecológica, basada en sistemas de solidaridad y trabajando para asegurar un cambio en nuestros patrones de producción y consumo, y trabajará para construir sociedades resilientes y sostenibles, fomentando el papel de los gobiernos locales y regionales en la gestión de los recursos naturales y su contribución a la resiliencia.

En la Declaración Política se reconoce que la igualdad entre los géneros es una condición fundamental para construir el futuro de la humanidad y se exhorta a situar la igualdad entre los géneros en el centro del desarrollo y a incluir las voces de las mujeres y las niñas en el proceso de localización con el objetivo de no dejar atrás a la mitad de la población del mundo. La cultura se concibe además como el cuarto pilar del desarrollo y es esencial para un desarrollo sostenible centrado en las personas.

Nuestro patrimonio municipalista, clave para lograr la universalidad y la solidaridad

Hacemos un llamamiento para lograr una membresía más unida de las asociaciones de gobiernos locales y regionales, que trabajen juntos para preparar la llamada década de implementación para lograr los ODS. Nuestras redes están convencidas de que a través del aprendizaje y de la cooperación descentralizada podremos desarrollar nuevos instrumentos para fomentar el conocimiento y la cooperación.

Nos comprometemos a contribuir a unificar las voces de los gobiernos locales y regionales a través de nuestras Redes y a través de nuestro trabajo conjunto dentro del Global Taskforce el ecosistema conjunto de redes hermanas, y reafirmamos que la Asamblea Mundial de Gobiernos Locales y Regionales es la plataforma que garantizará que el pensamiento de nuestras comunidades llegue al mundo entero.

La Declaración Política de Durban engloba el patrimonio municipalista de nuestro movimiento: los valores, las experiencias y las colaboraciones que hemos llevado a cabo durante más de un siglo son clave para ayudar a nuestras comunidades a lograr la transformación hacia sociedades sostenibles, justas e inclusivas que puedan encontrar una sociedad con futuro y el planeta.