Hacia respuestas a la COVID-19 que incluyan a la infancia y la juventud migrante a través de la experiencia #CitiesAreListening

El mandato de #CitiesAreListening es trascender de la distancia social a un mundo impulsado por las comunidades. Como paso para cumplir el Pacto por el Futuro que está desarrollando CGLU, en alianza con las comunidades, el #CitiesAreListening sobre “Respuesta y recuperación de Gobiernos locales y regionales a la COVID-19 para infancia y juventud migrante y desplazada ” abordó las perspectivas, las necesidades y las contribuciones de una comunidad que gradualmente se está convirtiendo en una parte integral de los esfuerzos locales de respuesta y recuperación a los impactos del COVID-19: la juventud migrante .

El lunes 30 de noviembre, esta experiencia tuvo lugar en forma de diálogo entre alcaldes, alcaldesas  y delegaciones juveniles. sobre lo que los gobiernos locales y regionales pueden hacer, y están haciendo, para asegurarse de que la infancia migrante y desplazada y sus familias estén incluidas en la preparación, respuesta y recuperación de la pandemia de COVID-19. La sesión fue coorganizada por CGLU, Metropolis y ONU-Habitat en colaboración con UNICEF y el proyecto Migración de Ciudad a Ciudad del Mediterráneo (MC2CM).

Inaugurada por Emilia Saiz, Secretaria General de CGLU, la experiencia #CitiesAreListening comenzó con un panel introductorio sobre las contribuciones de niños, niñas y jóvenes migrantes en las respuestas locales del COVID-19 y sus necesidades urgentes. En el panel participaron laAlcaldesa de Polokwane y Copresidenta de CGLU Thembisile Nkadimeng, la Directora de Prácticas Urbanas de ONU-Hábitat Shipra Narang Suri, el delegado de la juventud Ahmed Karimi del Grupo Principal de las Naciones Unidas para la Infancia y la Juventud (UNMGCY) y la especialista en políticas Laura Healy de UNICEF, quien presentó la nuevo paquete de recursos de UNICEF sobre COVID-19 e infancia  migrante y desplazada.

La igualdad está en el centro de la recuperación. Debemos prestar especial atención a cómo la pandemia está afectando a las personas en movimiento, en particular a los niños y niñas, asegurando que se reconozcan sus derechos, especialmente cuando también pertenecen a poblaciones que históricamente han sido discriminadas.” Thembisile Nkadimeng, Alcaldesa de Polokwane y Copresidenta de CGLU.

"Los jóvenes en movimiento también pueden desempeñar un papel crucial, ya que pueden cerrar la brecha tecnológica para toda su familia." Ahmed Karimi, delegado juvenil, UNGMCY.

Estas intervenciones introductorias fueron seguidas por un panel de alcaldes que destacaron las prácticas en curso a nivel local  sobre la respuesta y recuperación inclusiva a la  COVID-19 para la infancia y la juventud migrante y desplazada. Entre ellos, los participantes destacaron la importancia de poner fin al trabajo infantil, y Teherán y Quito expusieron los pasos tomados en sus ciudades para revertir este problema y establecer regulaciones para proteger a los niños.

Gissela Chalá, Vicealcaldesa de Quito, explicó cómo el marco nacional existente ayuda a los derechos de los jóvenes en Quito y destacó la relevancia de los arreglos legales comprometidos con brindar de manera efectiva un enfoque integrado para erradicar gradualmente el trabajo infantil.

Dr. Javadi Yeganeh, Teniente de alcalde de Asuntos Sociales y Culturales de la municipalidad de Teherán, destacó el progreso realizado por Teherán, como ciudad piloto de la Iniciativa Ciudades Amigas de la Infancia (CFCI) de UNICEF para brindar servicios educativos a la infancia migrante  y el papel crucial que desempeñan ellos y sus familias en el apoyo los esfuerzos de respuesta a la covid COVID-19 del municipio.

Fongu Cletus Tanwe, Alcalde de Bamenda, compartió la diversidad de esfuerzos municipales para inscribir a niños y niñas  migrantes en la escuela mediante el subsidio de las tasas escolares y los costos del material educativo.

El tercer segmento de la sesión involucró a representantes locales y delegados juveniles del Grupo Principal de Niños y Jóvenes de las Naciones Unidas (UNMGCY) en una discusión con miras al futuro sobre cómo las ciudades pueden ayudar a la infancia en movimiento en el contexto de la COVID-19.

Macoura Dao, Alcaldesa de Foumbolo y presidenta de REFELA, recordó cómo los niños sufren particularmente el impacto del COVID-19 y llamó a la movilización en torno a la Campaña REFELA para proteger a la infancia que vive en las calles de las ciudades africanas.

Ricardo Rio, Alcalde de Braga, recordó la necesidad de fortalecer los vínculos entre los municipios y las asociaciones de jóvenes, afirmando la responsabilidad social de la juventud  como un paso clave hacia las respuestas de emergencia a corto plazo, abordando las barreras lingüísticas y la inclusión de migrantes y la cohesión social en la ciudad.

Este argumento también fue destacado por Johnny Pereira, delegado de jóvenes de la UNMGCY, quien habló sobre la importancia de las actividades coordinadas entre las organizaciones de la sociedad civil locales, las organizaciones de base y organizaciones internacionales como ACNUR y UNICEF para la integración de migrantes, particularmente en sociedades de acogida fragmentadas.

Rachida Saadi, Directora de Cooperación y Relaciones Exteriores de Oujda, destacó la contribución de la cooperación internacional y los proyectos de asociación de ciudad a ciudad como el Proyecto MC2CM, hacia la compilación de una base de datos integral de migrantes en Oujda, que permitiría al municipio identificar de manera eficiente a los actores clave en las actividades de gobernanza de la migración, incluida la infancia y la juventud migrante a través de un enfoque multiactor.

Trang Vu, Delegada juvenil de UNMGCY, se refirió a la  la importancia de que la juventud migrante contribuya a través de redes informales y ONG locales como catalizadora para cerrar la brecha en la información y los servicios de salud para las comunidades migrantes durante la pandemia.

Generar confianza entre las comunidades de migrantes y los gobiernos locales y garantizar el acceso continuo de las personas  migrantes a los servicios públicos locales esenciales, con énfasis en los servicios de protección infantil, surgieron como prioridades fundamentales durante la sesión. Los representantes locales reconocieron la urgente necesidad de cambiar la narrativa para garantizar que las personas migrantes sean vistas como un aporte valioso para la innovación y  el desarrollo local. Los representantes de la juventud nos recordaron que los jóvenes en movimiento han estado desempeñando un papel crucial para cerrar la brecha digital y la brecha de información para todas sus familias y comunidades migrantes a la luz de las restricciones de COVID-19. La juventud  migrante se ha convertido en un faro de información y mediación cultural para sus comunidades.

Emilia Saiz concluyó esta reflexión colectiva elogiando los avances de esta conversación como un primer paso hacia el desarrollo de un nuevo contrato social basado en los principios de la Agenda 2030 y un Nuevo Pacto de Futuro. La incorporación de las necesidades de la juventud e infancia migrante  en la política migratoria y la renovación de la confianza de todas las comunidades en los gobiernos locales y regionales se mencionaron como fundamentales para garantizar la salud, la seguridad y la protección para todas las personas , y en particular para las más vulnerables.

Las sociedades y los gobiernos locales, como el nivel de gobierno más cercano a la sociedad, tienen un papel clave en la protección de la infancia, incluida la  infancia  migrante. La provisión de servicios básicos es muy crítica para esto y esta sesión ha identificado intervenciones concretas dirigidas a la provisión de servicios para la protección de la niñez que realmente pueden marcar la diferencia. Esta pandemia nos ha permitido reflexionar de manera diferente sobre lo que es esencial y lo que no. Y ciertamente pensamos que abordar las necesidades de la infancia  migrante será muy importante en el futuro. " Emilia Saiz, Secretaria General de CGLU

Recomendaciones políticas clave:

Mejorar el acceso a los servicios básicos

  1. Incluir a la infancia migrante y desplazada en los esfuerzos de preparación, respuesta y mitigación de la COVID-19, particularmente mejorando el acceso a los servicios básicos.
  2. Fortalecer la prestación de servicios públicos, incluida la atención médica, el acceso a servicios de agua e higiene, protección social y protección infantil, para garantizar que las familias migrantes y desplazadas tengan acceso a los servicios básicos.
  3. Establecer cortafuegos entre los proveedores de servicios locales y las autoridades de inmigración, a fin de evitar  que las familias indocumentadas no rechacen  usar los servicios por temor a ser detectadas. Eliminar los requisitos de identificación que restringen el acceso a los servicios.
  4. Reconocer los servicios de protección infantil como servicios básicos esenciales y trabajar para erradicar el trabajo infantil y mejorar las condiciones de los trabajadores menores de edad.

Fortalecimiento de la confianza y la participación

  1. Priorizar la creación de confianza entre las instituciones públicas y la juventud migrante y desplazada  y sus comunidades para ayudar a fomentar la inclusión a nivel local.
  2. Asegurar que las decisiones públicas y la formulación de políticas incluyan las perspectivas de la infancia y la juventud s en movimiento fomentando mecanismos de participación más efectivos e inclusivos.
  3. Establecer consejos juveniles integrados por jóvenes de diferentes comunidades y organizaciones con el fin de garantizar un asesoramiento, consulta y cooperación continuos y sustanciales sobre la gobernanza urbana.

Promoción de la comunicación y narrativas justas

  1. Mejorar la comunicación entre los niños, niñas y jóvenes migrantes y desplazados y sus comunidades de acogida para fomentar la inclusión, contrarrestar la desinformación y construir puentes entre las comunidades.
  2. Implementar estrategias de educación para el aprendizaje continuo de todos los niños y niñas, incluidos migrantes o desplazados, y hacer que las escuelas sean entornos seguros, saludables e inclusivos COVID-19 para la infancia  y las familias en movimiento.

Reducir las brechas culturales y digitales

  1. Aprovechar y promover el papel de los niños, niñas y los jóvenes como socios clave en la lucha contra la desinformación y el apoyo a la inclusión de las personas migrantes y desplazadas en las políticas urbanas: muchos jóvenes migrantes y desplazados ya están actuando como intérpretes culturales para sus familias y comunidades.
  2. Reconocer a los niños, niñas y jóvenes migrantes como socios clave para ayudar a cerrar la brecha digital, acelerar el progreso, la innovación y reducir las desigualdades en sus comunidades.

 

Próximos pasos:

CGLU mantiene su compromiso de impulsar esta agenda a nivel mundial, contando con el apoyo de UNICEF, para ayudar a equipar ciudades y regiones del mundo con las herramientas, recursos y argumentos que necesitan para incluir, proteger y empoderar a la infancia y la juventud migrante y desplazada. Al mismo tiempo, UNICEF brinda oportunidades únicas para mostrar el papel fundamental y el trabajo de los gobiernos locales y regionales que defienden los derechos de la infancia y la juventud migrante y desplazada, escuchándola, trabajando con ella y ayudando a fomentar su potencial. Sobre la base de estas discusiones, CGLU y UNICEF exploran desarrollar   un conjunto de herramientas y convocar varias sesiones de desarrollo de capacidades para apoyar a los gobiernos locales y regionales  a fin de incluir a la infancia y juventud migrante y desplazada   en la respuesta y recuperación de la COVID-19.

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